¿Cómo ha evolucionado la transformación digital en el sector minero peruano?

La minería sustenta el 45% de la actividad económica del mundo. Además, es el sector en el que mayor cantidad de dinero se invierte cada año. Parte de esta inversión ha recaído en la digitalización de las minas; y es que la minería también ha tenido que dar el paso hacia la transformación digital.

En el caso de la minería, no ha sucedido lo mismo que en el sector de la construcción, donde vemos un avance tecnológico lento y resistente a la implementación tecnológica a gran escala. En su lugar, observamos cómo el interés por la digitalización es tal, que las empresas del sector, a nivel mundial, planean aumentar su inversión tecnológica en un 82% en los próximos años.

Esto no es algo que haya sucedido de la noche a la mañana. Los primeros grandes pasos hacia la implementación tecnológica comenzaron a darse en el 2010, y desde entonces la inversión ha ido en aumento, puesto que las compañías han notado mejoras en sus procesos.

La transformación digital no es una moda pasajera, es una necesidad para aquellos sectores que quieran mejorar su productividad, tiempos y procesos. Además de reducir el riesgo de siniestros en sus proyectos.

Con la llegada del COVID-19 la transformación digital, que ya había empezado a notarse en el sector minero, se aceleró. Y es que surgió la necesidad de encontrar nuevas formas de seguir trabajando en las minas. De esa manera, muchas empresas empezaron a mecanizar o automatizar sus operaciones; además de agregar sensores de equipos y adoptar redes unificadas para la transmisión de datos.

Los gemelos digitales en minería. Gracias a los cuales es posible conocer el estado real de los equipos en campo, tanto aquellos de gran tamaño (camiones de volteo, por ejemplo), hasta los más pequeños.

Realidad aumentada en el sector minero. La cual ha permitido que, con solo el uso de dispositivos de visualización AR podamos ver las diferentes funciones de la mina en tiempo real.

Implementación de sensores en proyectos mineros. Los cuales favorecen labores mantenimiento y monitoreo en mina. Gracias a ellos podemos tener datos en tiempo real de los equipos.

El valor del IoT en proyectos mineros. Que permite monitorear y contabilizar activos y personas en grandes distancias, incluso en condiciones de riesgo.

Aumenta el uso de robots y máquinas autónomas en proyectos mineros. Permite reducir la exposición a riesgos por parte de la mano de obra humana.

Evolución de la transformación digital del sector minero en Perú

La era digital también ha llegado a la minería peruana. Incluso, actualmente en el país existe una mina 100% digital en Moquegua: Quellaveco. No obstante, esta no es la única empresa de la gran minería que ha empezado a apostar por la digitalización, otras que han mostrado interés han sido Las Bambas, Antamina y Hudbay.

En general, el interés de la mayoría de las empresas ha recaído en el mejoramiento del control de los datos; por lo que han optado por implementar tecnologías que cuenten con algoritmos de previsibilidad basados en estos.

Así mismo, las grandes empresas mineras también han mostrado interés por soluciones tecnológicas como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y el IoT. Esta tendencia, no obstante, todavía no se replica en la pequeña y mediana minería en la misma escala.

Las implementaciones tecnológicas en la minería peruana, en consenso, han buscado resolver problemas específicos del sector. El primero de ellos, lograr minas más eficientes, productivas y con menos costos. Otro desafío al que se enfrenta la minería, en cuanto a implementación tecnológica se refiere, se enfoca en lograr una mina inteligente, es decir aquella que utilice datos para mejorar la eficiencia y que permita obtenerlos en tiempo real incluso en excavaciones subterráneas. La mina inteligente también requiere del uso de drones, robots, entre otras máquinas capaces de realizar procesos de alto riesgo, los cuales, generalmente son hechos por mano obrera.

El tercer reto de las minas es la implementación de los gemelos digitales antes mencionados; y, finalmente, también reducir los riesgos de seguridad, así como conseguir que los proyectos mineros sean más ecológicos y sostenibles.