El impacto de la evolución tecnológica en la industria minera

En la actualidad la industria minera nacional e internacional enfrenta múltiples exigencias y desafíos, entre los cuales se cuentan la mayor demanda global de materias primas como cobre y litio, la necesidad de optimizar el ritmo de producción para no perder competitividad, la creciente baja en las leyes de numerosos yacimientos estratégicos, y las cada vez más exigentes normativas ambientales de diversos países.

Todo ello ha derivado en la urgente necesidad de transformar los actuales procesos productivos, con el objetivo de optimizar al máximo su eficiencia y sustentabilidad. Una meta que sólo puede alcanzarse mediante el uso intensivo de tecnología, incluyendo soluciones digitales de última generación y nuevos programas de automatización, entre otras múltiples alternativas.

El valor del Smart Mining

Debido al impacto y complejidad de todos esos retos y contingencias, la industria minera se ha visto encaminada a mejorar su productividad mediante el uso de lo que se conoce como “minería inteligente” o Smart Mining, la cual brinda amplias y mejores perspectivas de consolidar y recuperar competitividad en el mercado.

El concepto de Smart Mining implica, básicamente, impulsar e intensificar la digitalización y automatización de los procesos mineros, mediante el uso de avanzadas soluciones tecnológicas que incluyen computación en la nube, softwares de modelamiento, equipos automatizados, analítica de datos, inteligencia artificial, Internet de las Cosas y conectividad 5G, entre otras variables.

Todos estos avances ayudan a recopilar, interpretar y utilizar información estratégica en tiempo real sobre las condiciones de operación de equipos humanos y técnicos, lo cual contribuye a optimizar la producción en todo su conjunto. Al mismo tiempo, se minimizan los períodos de inactividad, se reducen costos de mantenimiento, y se aligera la presión sobre las operaciones, entre otros beneficios.

Consolidación y expansión mundial

Los avances tecnológicos correctamente aplicados garantizan seguridad en la recopilación y manejo de datos, así como en el mantenimiento a largo plazo de activos críticos para el negocio. Estos factores, en su conjunto, permiten que la minería inteligente gane gradualmente más aceptación en todo el mundo, incluyendo Chile.

Y se trata de un proceso que avanza a ritmo sostenido, pues, de acuerdo con el último informe realizado por el Grupo IMARC, denominado “Crecimiento del mercado de Smart Mining: Tendencias globales de la industria, participación, tamaño, oportunidad y pronóstico 2021-2026”, el mercado de la minería inteligente en el mundo crecerá a una tasa compuesta anual (CAGR) de 19%.

La trascendencia de esta conclusión no sólo se basa en su actualidad, sino también en el hecho de que fue proporcionada por uno de los reportes internacionales más importantes de la industria minera, en cuyas páginas se analiza el trabajo de los principales proveedores del sector, así como de las diferentes operaciones que hoy se ejecutan en todo el mundo.

Las nuevas tendencias inteligentes en la minería

De acuerdo con las conclusiones del citado reporte, el desarrollo de la minería inteligente no sólo permite incrementar la producción, sino también optimizar la seguridad y la sustentabilidad de los respectivos yacimientos.

Esto implica avanzar en la superación de desafíos tales como:

Integrar diferentes plataformas tecnológicas.

Lograr mayor eficiencia operativa.

Avanzar hacia una mejor analítica de datos aplicada a todos los ámbitos del negocio.

Así, por ejemplo, el uso combinado de redes de sensores y analítica de datos para contrarrestar el impacto de ciertos factores de riesgo ambiental, permitiría reducir la exposición continua de los trabajadores a elementos dañinos para su salud como rayos ultravioleta, polvo, ruido y productos químicos, entre otros. 

A esta ventaja se suma el crecimiento de las flotas de camiones autónomos, equipos de control remoto, drones de prospección y supervisión, perforadoras robotizadas y sistemas de ventilación controlados a distancia, entre otras diversas soluciones que proporcionan condiciones de trabajo más seguras, al mismo tiempo que mejoran la productividad operacional.

4 soluciones tecnológicas para la minería

Al mismo tiempo, el informe del Grupo IMARC también prevé que las crecientes preocupaciones ambientales y la implementación de regulaciones gubernamentales cada vez más estrictas sobre control de emisiones, también impulsarán significativamente el crecimiento de la minería inteligente en los próximos años.

Esto debería reflejarse en avances tales como:

Prevenir potenciales crisis ambientales.

Apoyar el cumplimiento de normativas de emisión.

Detectar gases peligrosos provenientes de insumos almacenados.

Medir en forma más eficiente condiciones ambientales variables como temperatura, luminosidad y concentración de CO2, entre otras.

Levantar alertas automatizadas en tiempo real sobre situaciones de emergencia que requiriesen, por ejemplo, detener las operaciones y evacuar al personal.

Ventajas concretas del “medioambiente inteligente” en la minería

Hablar de Smart Mining también implica avanzar hacia una nueva dimensión de eficiencia y seguridad, que se traduce en algunos de los siguientes beneficios para las operaciones mineras:

Mejor productividad Las soluciones Smart Mining eliminan cuellos de botella, agilizan operaciones y permiten disponer de sistemas de automatización más rápidos.

Mayor rentabilidad: Se incrementan las horas efectivas de producción y se reduce la inactividad de hombres y equipos. Asimismo, la operación remota de maquinaria aumenta la transparencia y ofrece mejor información descriptiva de la situación, mejorando la predicción de escenarios de contingencia.

Operaciones más sostenibles: Una mayor automatización, unida al uso de energías alternativas no convencionales, como eólica, solar y geotérmica, reduciría la emisión de gases de efecto invernadero, así como la huella de carbono de las operaciones mineras.

Análisis de datos en tiempo real: La visibilidad instantánea de la producción, considerando calidad, tiempos de ciclo operacional, estado de equipos y otras variables, así como el procesamiento de grandes bases de datos, proporciona una comprensión más profunda de los recursos disponibles.

Esto contribuye a optimizar el flujo de materiales, anticipar fallas y asegurar un monitoreo más eficiente de personas, equipos y vehículos, en todas las diferentes etapas del proceso productivo, incluyendo prospección, topografía, perforación, voladura, excavación, transporte y procesamiento de minerales.

Todas estas ventajas posicionan a la minería inteligente como la mejor alternativa para optimizar los procesos productivos del sector, contribuyendo a ahorrar energía y recursos naturales, proteger vidas e infraestructura y garantizar la continuidad operacional de todo el proceso, incluso en escenario de estrés climático y energético.