Una revolución en la minería está siendo impulsada por la tecnología

El cambio está impulsado por necesidades claras dentro de la industria, principalmente la necesidad de mejorar la seguridad y reducir el riesgo. Junto con esta reducción del riesgo, la tecnología sirve para mejorar la productividad y la eficiencia. La capacidad de los mineros para mejorar la seguridad y la productividad depende en gran medida de una cualidad: el conocimiento.

El conocimiento es seguridad
El conocimiento (sobre los entornos, el riesgo y la relación de los seres humanos con el riesgo) siempre ha sido un bien preciado en la industria. La expresión “canario en una mina de carbón ” tiene su origen en una forma temprana y rudimentaria de tecnología de medición de la calidad del aire . Los canarios, que son más sensibles a los gases peligrosos que los humanos, serían llevados a las minas. Si el canario se desmayaba o moría, era una indicación de que los humanos también estaban inhalando gases peligrosos y debían abandonar el área de inmediato. 

La minería sigue siendo una actividad excepcionalmente peligrosa. La maquinaria grande, los pesos masivos, las altas energías y, a menudo , las operaciones remotas plantean una amplia gama de amenazas potenciales. Cuanta más información tengamos sobre entornos mineros, operaciones, equipos y riesgos, más seguros y productivos podremos trabajar. En un área de alto impacto como una mina, saber exactamente dónde se encuentran las personas, los vehículos, el equipo y las zonas de peligro, y su condición, le permite administrar el riesgo y las consecuencias de manera eficaz. 

Hemos recorrido un largo camino desde que llevamos un pájaro en una jaula por un pozo de mina. Hoy podemos monitorear de cerca la posición y la relación entre cientos de equipos , miles de humanos y varias zonas de riesgo o peligro potencial. Las personas están equipadas con dispositivos portátiles (relojes inteligentes, etiquetas o mochilas) que transmiten su ubicación, los monitorean en busca de signos de peligro, fatiga o lesiones y les permiten solicitar asistencia al instante.

Los vehículos están equipados con sistemas para evitar colisiones que emiten instantáneamente una alerta si es probable que se crucen o se acerquen demasiado a personas u objetos. Las zonas de mina están equipadas con sensores multimodales que analizan los químicos atmosféricos, el ruido y la energía potencial , por ejemplo, para actualizar constantemente los riesgos y amenazas. Los sensores también permiten la vigilancia y la reducción de robos.

Vimos el potencial de estos sistemas durante la pandemia de coronavirus, cuando las etiquetas portátiles permitieron que las minas implementaran sistemas para el rastreo de contactos que eran más efectivos que los simples controles de temperatura, por ejemplo, porque no dependían de que las personas infectadas mostraran síntomas. Los sistemas portátiles también permiten a los empleados alertar rápidamente a los supervisores si otros empleados los acosan o amenazan, así como si están en peligro.

Nos acercamos rápidamente al objetivo final de la planificación operativa en la que todas las variables con un efecto potencial en la seguridad y la productividad, y sus relaciones, sean analizables en tiempo real.

Todo comienza con la conectividad

Nada de esto hubiera sido posible sin los avances en la confiabilidad y efectividad de la conectividad en los sitios mineros . La minería a menudo se lleva a cabo en áreas remotas, en medio de terrenos inhóspitos. Los sitios mineros se caracterizan por el ruido, el polvo, las temperaturas extremas, los fenómenos meteorológicos extremos, los campos magnéticos y las líneas de visión directas oscurecidas por millones de toneladas de roca y mineral. Además de esto, a veces no es suficiente que la conectividad funcione en estas condiciones. Un segundo de retraso en la transmisión de una señal puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.  

Los avances en conectividad (nacidos en algunos casos de aplicaciones militares y de primeros auxilios) han incorporado ambas tecnologías específicas: tecnología de malla ; protocolos LoRaWAn; sistemas de posicionamiento global; motores de ubicación BlueTooth ; etc. – y la comunicación entre protocolos que permite que estas tecnologías interactúen y se apoyen entre sí para crear una red de conectividad robusta e ininterrumpida que se extiende por toda la zona de operaciones, incluso bajo tierra .

Generando datos

Una vez que hemos establecido una conectividad confiable y efectiva, el siguiente paso es generar datos utilizables. Los sensores pueden controlar los niveles de polvo, ruido o CO2, por ejemplo. Las cámaras y los micrófonos pueden transmitir datos visuales y auditivos. Los monitores de frecuencia cardíaca pueden transmitir datos sobre la salud humana

Pero el poder de los datos comienza a surgir cuando se analizan en tiempo real mediante un software avanzado. El aprendizaje automático y las IA pueden examinar datos y comenzar a hacer predicciones sobre el futuro. Los micrófonos instalados en las cintas transportadoras pueden identificar los cojinetes que deben reemplazarse. Los sistemas de monitoreo de pendientes pueden generar alertas si las pendientes parecen inestables. Y los sensores portátiles pueden identificar la fatiga antes de que genere problemas de seguridad .  

El futuro

El futuro de la tecnología en la minería estará impulsado por las IA, lo que permitirá un análisis de datos cada vez más rápido y sofisticado, y una capacidad cada vez mayor para modelar con precisión escenarios futuros probables.

Las IA también permitirán que la robótica se vuelva más autónoma, reduciendo el papel de supervisión que los humanos deberán desempeñar. Todavía estamos a muchos años, si no décadas, de robots verdaderamente autónomos en las minas, pero incluso los robots que dependen de controladores humanos tienen aplicaciones obvias en términos de examinar áreas peligrosas o realizar tareas peligrosas, y se están adoptando rápidamente en toda la industria.

El rol humano en evolución

Los robots no van a dejar a la gente sin trabajo, pero la naturaleza del trabajo en la minería inevitablemente cambiará. La tecnología reducirá la exposición humana al riesgo. Los trabajos peligrosos, desagradables o insalubres serán realizados cada vez más por sistemas controlados o autónomos . Las personas asumirán cada vez más roles de supervisión. Esto requerirá la atención de los mineros en términos de capacitación y gestión del talento. El resultado será que los seres humanos se dedicarán a un trabajo más estimulante, gratificante y saludable.

Desde los primeros días de la minería , una pregunta primordial ha sido "¿cómo garantizamos la seguridad de las personas dentro de estos entornos excepcionales y de alto riesgo"? La respuesta ha demostrado ser el conocimiento en tiempo real, respaldado por una conectividad robusta y analizado por sistemas de software inteligentes . Es un área tremendamente emocionante de desarrollo tecnológico y tiene beneficios tangibles para las empresas mineras y sus partes interesadas. El resultado es una mina que sirve a sus empleados, reduce el riesgo y mejora la productividad.