Logística: el sector clave dentro de la organización minera

La pandemia de la COVID-19 ha golpeado duramente al país. Todos los sectores económicos han debido adaptarse a la nueva normalidad. El sector minero también. Sus unidades logísticas han tenido que explorar otros ritmos para enfrentar el temporal. Para empezar, han potenciado nuevas compras para salvaguardar la seguridad de sus trabajadores. Enrique Alania, gerente de Logística de Cía. Minera Antamina, afirma que la pandemia ha hecho que esta empresa adquiera otros servicios bajo el propósito de continuar, en lo posible, con sus operaciones. 

“Nosotros tratamos de recuperar la normalidad y buscamos que sea en un marco de seguridad sanitaria, y que ello se mantenga en nuestros proveedores y contratistas. Esto es fundamental, porque la vida está de por medio”. Eso sí, el vocero considera que ninguna empresa está operando exactamente tal como lo hacía antes de la pandemia. Por su lado, Carlos Ciriani, director de Logística Extractiva en Ransa, afirma que, en realidad, el sector se ha ido moviendo poco a poco a partir de junio y rescata el apoyo social de las empresas mineras apenas empezó la pandemia. 

“Durante este periodo, las compañías del sector movilizaron sus recursos logísticos en beneficio de las poblaciones de sus zonas de influencia, a las cuales dieron soporte a través de donaciones de víveres, medicinas, pruebas de diagnóstico, así como el traslado de carga urgente”, señala. Recalca que en Ransa, desde antes de la pandemia, potenciaron sus servicios de logística en origen, flete internacional, agenciamiento aduanero, depósito temporal, almacenaje, transporte y Onsite, todos atendidos bajo altos estándares de seguridad.

“Cuando apareció la pandemia, priorizamos la salud y seguridad de nuestros trabajadores. Además, activamos un comité de crisis desde el cual se gestionó rápidamente la toma de decisiones y el flujo de información. A la par, fue clave asegurarnos de contar con la suficiente liquidez para afrontar las necesidades propias de la coyuntura, así como simplificar procesos y la toma de decisiones”.

Mejoras creativas

La tecnología en la innovación logística debe basarse en tres ejes: la consolidación de la data, la gestión de procesos digitales y la integración con proveedores. Así lo asegura Ciriani, de Ransa. Y añade: “Los beneficios de seguir esta hoja de ruta se evidencian, por ejemplo, en la capacidad de procesar y analizar la gran cantidad de datos que se manejan en las operaciones para poder tomar decisiones efectivas (business analytics)”. 

Es normal, explica, que cuentan con cientos de reportes, check lists, formatos, etc., los cuales completan y archivan. “Sin embargo, contar con un data lake donde se pueda centralizar toda la información y poder presentarla en un dashboard con indicadores clave cada vez es más indispensable”.

En un tono más filosófico, Enrique Alania señala que uno siempre tiene que reflexionar cómo hace las cosas y, antes de eso, por qué las hace. “La innovación no es exclusiva de Silicon Valley; es decir, no se trata de tener una idea genial con la cual vamos a ganar el premio Nobel. Innovar es una actitud hacia la vida que nos lleva a repensar las cosas y a reflexionar qué podemos cambiar. El resto viene por añadidura”. 

Pero también surge otra interrogante: ¿La minería peruana, la que exportó 28 mil millones de dólares el 2019, está aprovechando al máximo los avances tecnológicos? Alania opina que una parte importante en el proceso logístico es la confiabilidad en los tiempos y en las cantidades. En esa línea, “todos los aplicativos deben ayudar a que uno tenga información certera, clara, precisa y fidedigna de lo que existe y de lo que puede tener”. Esto permite configurar la trazabilidad de las operaciones y genera confianza en que todo se va a dar en los tiempos previstos.

Asimismo, recalca que el aporte de la tecnología también alienta a procesos más transparentes. “Permite tener un sistema que te garantiza que las ofertas se entreguen en el día y hasta la hora indicada y que los sobres se abran en determinada fecha, y no después”. En el sector minero los retos aún son muchos. El rol del Estado es fundamental. Por ejemplo, hoy “solo el 33% de la red vial nacional es asfaltada y en su mayoría son pistas de una sola vía”, afirma Ciriani. 

Ello, sumado a la complejidad que ya se tiene por el tipo de carga que se suele trasladar, hace indispensable que las empresas cuenten con un partner logístico de un elevado grado de especialización. Se deben añadir otros desafíos, como la transformación digital y la formalización al máximo de proveedores pequeños y medianos, entre otros. Son varios los temas por resolver en el rubro logístico. Las expectativas son grandes.

 Proyecciones positivas

Para Gabriel Reátegui, gerente de Transporte de Minería y Proyectos Especiales de Savar, el trabajo logístico en su rubro se incrementó. “Nuestro negocio estuvo dentro de los que sí calificaron para seguir operando. Muchas empresas nos empezaron a pedir transporte de productos para sus campamentos mineros, equipos nuevos para el personal, módulos de habitabilidad, entre otros”.

Todas esas adecuaciones y protocolos -que no estaban previstos a inicios de año- le dieron un giro al trabajo logístico en Savar. Felizmente, como Reátegui lo indica, salieron airosos y hoy ya se están preparando para un fin de año mucho más intenso en lo laboral. “Ya hemos tenido reuniones virtuales con nuestros clientes y lo que se viene para diciembre realmente va ser importante a nivel de nuestros servicios”.